el Louvre ocupado


Le Louvre pendant la guerreGuillaume Fonkenell (conservador), Le Louvre pendant la guerre. Regards photographiques 1938-1947 [El Louvre durante la guerra. Miradas fotográficas. 1938-1947], exposición del Museo del Louvre, París, 7 de mayo a 31 de agosto 2009.

En este año de conmemoraciones, el Louvre también hace la suya. Durante la larga ocupación nazi de París y de buena parte del territorio francés, las colecciones nacionales plantearon un galimatías para la República Francesa. Mediante una serie interesantísima de 56 fotografías de época, la mayoría inéditas, el museo del Louvre mostró, hasta el 31 de agosto pasados, el destino de las principales obras que guarda el museo. La muestra es la oportunidad de presentar al público las recientes colecciones descubiertas en París y Coblenza: el fondo del fotógrafo Pierre Jahan, comprado por el Louvre en 2005 y el fondo encontrado por casualidad en los archivos históricos de Coblenza en 2004.

Ya durante la crisis de los Sudetes, en septiembre 1938, algunos simulacros se habían efectuado en el museo parisino: evacuación de obras de arte, ventanas tapiadas con sacos de arena, protección de obras que no podrían ser transportadas. Cuando la línea Maginot fue rota por los nazis, se hizo evidente la urgencia de la evacuación de las colecciones nacionales.

La invasión nazi sucede en medio de una época de renovaciones del museo que, obviamente, tuvieron que ser suspendidas. Jacqus Jaujard, director de los museos nacionales, organizó el traslado y la gestión de los museos franceses. Mientras los fondos monetarios y en oro franceses fueron evacuados hacia las costas, las obras de arte lo fueron hacia castillos del interior, lejanos a centros industriales o ferroviarios susceptibles de ser bombardeados. Así, el 28 de agosto de 1939, la Mona Lisa deja el Louvre y el 3 de septiembre, al día siguiente de la declaración de guerra contra Alemania, deberían seguirla las obras más importantes de la colección. 3690 pinturas emprendieron el viaje en treinta y siete convoyes, al lado de la multitud que también dejaba París. Primero a Chambord, y con la aproximación de las líneas de combate, Louvigny, las obras continúan su viaje hacia la abadía de Loc Dieu, al museo de Montauban y finalmente a Montal.

Laure Albin-Guillot, Conversation entre antiques
Laure Albin-Guillot?, Conversación entre antigüedades. 13.8 x 11.6 cm. Fondo Aulanier. De derecha a izquierda se reconocen: Apolón Richelieu (época imperial romana), copia de Afrodita del Capitolio (época imperial romana), copia de Hércules Farnesio (época imperial romana), Flora (quizás de época romana imperial), Afrodita y Eros (copia de época romana imperial), Hygia (época romana imperial), Afrodita Capitolina (copia de época romana imperial), otra Hygia (época romana imperial), Ninfa Anquirroes (copia de época romana imperial), Atenea (época romana imperial) y Hércules (copia de un antiguo)

El Louvre permanecería cerrado cerca de un año. Sin embargo, tras la entrada a París de las tropas nazis el 14 de junio 1940, la autoridad de ocupación se dio a la tarea de reabrir los museos capitalinos, con el deseo de dar a la vida parisina una imagen de normalidad. El Museo del Hombre, el Carnavalet y el Cernuschi reabrieron el 17 de septiembre y el 22 lo hizo la Orangerie del Louvre. Pero el Louvre lo haría el 1° de octubre, tras una ceremonia oficial el día anterior, con la presencia del mariscal von Rundstedt. El museo sólo contaba con la planta baja, algunas obras originales y reproducciones del resto. Casi la totalidad de las salas se encontraba vacía.

Marc Vaux, La Grande Galerie abandonnée
Marc Vaux, La Gran Galería abandonada. Contratipo ejecutado para el Louvre por Alexandre Séarl. 16.1 x 11.3 cms. Fondo Aulanier

El gobierno de Vichy, con el general Petain a la cabeza, inició una política de «intercambios», sobre todo con la España del dictador Franco y Alemania. A España se fueron la célebre Dama de Elche, la Inmaculada Concepción por Murillo y nueve coronas del tesoro de Guarrazar. A cambio, Francia recibió un retrato de María Ana de Austria atribuido a Velásquez y el retrato de Antonio de Covarrubias por El Greco. Con Alemania, casi se consuma el traslado del cuadro de Boucher Diana saliendo del baño. El ministro nazi de Relaciones Exteriores, von Ribbentrop, admiraba ese cuadro. A cambio, las autoridades del Louvre pidieron ocho cuadros de Watteau. La idea era de disuadir a las autoridades nazis pues Watteau era extramadamente célebre entre ellos.

Pierre Jahan, Plein cadre sur le ballet des balayeurs
Pierre Jahan, Un marco para el ballet de los barrenderos, 20.1 x 20 cms. Fondo Histoire du Louvre

¿Quiénes tomaron las fotos? En aquéllos tiempos, no cualquier persona estaba autorizada para tomar fotos al interior de los museos. De entrada, de las 56 fotos exhibidas, 20 fueron tomadas por fotógrafos amateurs no identificados. Sin embargo, se sabe que varios miembros del personal del museo contaban con cámaras portátiles que comenzaban a ponerse de moda. Otras fotografías de autor no identificado corresponden, quizás, a un soldado nazi que sigue el depósito de los bienes de una familia judía. También se cuentan con fotografías de prensa, como las realizadas por el húngaro Paul Almasy y de propaganda. Por último, se exhiben veinte de otros fotógrafos identificados, pero cuyos móviles son difíciles de discernir. Los nombres más importantes, en fin, son los de los fotógrafos Pierre Jahan, Laure Albin-Guillot y Marc Vaux.

La muestra se centra en el destino de la Victoria de Samotracia, la Venus de Milo, la Mona Lisa o Joconda y el cuadro Diana después del baño de Boucher. También se muestran algunas de las obras que se quedaron en las bodegas del museo. Las fotos son muy elocuentes. Sobre todo aquélla donde se ve a la Mona Lisa saliendo de su empaque. Nunca su sonrisa había sido menos misteriosa. En la foto parece que sonríe a los empleados del Louvre, como si sonriera de alivio.

Pierre Jahan, La Joconde en observation, 17 juin 1945
Pierre Jahan, La Joconda en observación, 17 juin 1945, 18 x 18.7 cm., fondo Histoire du Louvre

Todas las fotografías reproducidas aquí pertenecen a sus autores o sus herederos. Fueron reproducidas del catálogo de la exposición: Guillaume Fonkenell (dir.), Le Louvre pendant la guerre. Regards photographiques 1938-1947, Paris, Musée du Louvre Éditions, Le Passage, 2009.

Un comentario

  1. Sin duda un horrible momento histórico en el que los Nazis «secuestra al Louvre» y queman obras de todo tipo (en especialmente aquellas concebidas por artistas judíos).

    Las photos de Pierre Jahan me parecen fascinantes, en especial esta última que muestra el regreso de la Mona Lisa al museo y en la que, como bien hace remarcar Radinito, se observa una Joconda feliz de regresar a casa y de haber sido rescatada.

    Para más detalles sobre la exposición les recomiendo el siguiente documento en PDF, corto pero nos da una idea más amplia d los temas abordados durante la exposición.

    Haz clic para acceder a src_document_54970_v2_m56577569831230271.pdf

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